La ética del despiadado | ¿Dónde esta es limite entre la empatía hacia uno mismo y la empatía hacia el otro?
La ética del despiadado | ¿Dónde esta es limite entre la empatía hacia uno mismo y la empatía hacia el otro?
Este libro se dirige a todos aquellos que estén cansados de ser demasiado serviciales y demasiado complacientes por miedo a que los abandonen. A aquellos que evitan el conflicto por miedo al rechazo.
El miedo al conflicto apoltrona, estanca y empobrece, por ello oprimimos y encorsetamos nuestra personalidad para agradar y que no nos castiguen. Tememos nuestra propia rabia, aceptamos la sumisión, mendigamos amor y creamos relaciones de poder en las que somos o dominantes o sumisos. Normalizamos, permitimos y pasamos por alto los abusos de baja intensidad. Creemos que ser buenos consiste en no expresar el enfado.
Adriana Royo despliega, con un certero análisis y de manera crítica, los diversos mecanismos psicológicos del abuso, la manipulación, la culpa y la rabia, para que aprendamos a identificar y a protegernos de los distintos tipos de tiranos. Hace un recorrido por el ámbito familiar, así como por las relaciones de pareja y otros espacios sociales. En definitiva, este libro nos ayudará a rebelarnos, a amar con una rabia digna y así hacernos respetar.
EXCLUSIVO de Librería Capítulos
Detalles:
- Autora: Adriana Royo
- Editorial: Ediciones B
- Idioma: Español
- Tapa blanda: 288 páginas
Adriana Arroyo (Barcelona) es una joven terapeuta y escritora. Especialista en estrés y conducta, sigue un modelo estratégico de reprocesamiento emocional y terapia breve, con el que ayuda a superar miedos, traumas y diversas psicopatologías.
Es autora del libro Falos y falacias (2018), que se centra en el autoengaño en relación con la sexualidad dentro del contexto social narcisista actual. Investiga sobre el comportamiento humano y es defensora del pensamiento crítico. Escribe, desde hace años, en su blog, donde explora distintos aspectos de la psicología humana tales como el sexo, las emociones y las disfunciones sociales.